Cuando estaba ya en prensa el pasado número de SAUDAR, nos enteramos de la muerte de nuestra Socio de Honor. SAUDAR como ha hecho con todos sus Socios de Honor, quiere dedicar unas páginas especiales de la revista, vaya nuestro más sentido pésame a su hermano Aurelio, sus hermanos políticos Josefa García Fernández, José Mª Díaz Píñar y Araceli Rivero Pastor y a sus sobrinos Francisco, Lucía María, María Asunción, Juan Francisco, María José, Gloria y María Rosa, así como al resto de la familia. El 26 de noviembre del pasado año, falleció en Córdoba, nuestra Socio de Honor, Doña Filomena García Vílchez, el día 28 del mismo mes, recibían sepultura sus restos en el Cementerio Municipal de San Sebastián, entre el cariño de los cientos de personas congregados en la Parroquia de la Asunción.

Para los que tuvimos la suerte de conocerla, algunos desde muy niños, siempre fue una mujer dedicada por entero a la enseñanza y a los demás, ganándose el respeto de sus compañeros y alumnos, fue durante muchísimos años directora del Colegio “General Fresneda”, su primera directora, cuando la enseñanza primaria tradicional fue  renovada por la Educación General Básica, para ella, comentaba en un artículo “Antes, el medio ambiente, limitado y estrecho, sólo permitía las pinceladas indispensables para una instrucción rudimentaria. Después, el tiempo y la ambientación tuvieron la virtud de una apertura hacia el exterior”.

Quizás el peor año de su vida fue: 1974, cuando el sábado 8 de junio, tuvo que afrontar la muerte trágica de dos compañeros, tres alumnos y el chófer del autobús escolar, así como diez heridos graves. Todos eran alumnos y profesores del Colegio “General Fresneda” que venían de Baeza de realizar unas competiciones deportivas, ella en un escrito realizado para la revista “Galduria” dijo “ten valor y pelea con brío que el premio es eterno”. Y así fue toda la vida de Doña Filo, después su marcha a Granada, donde finalizó su labor docente.

El día 10 de febrero de 1984, recibió el título de la concesión por el Ministerio de Educación y Ciencia del Lazo de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio, entregándoselo nuestro paisano el Delegado Provincial de Educación, Francisco Soriano Serrano, estando acompañada del jefe de inspección de EGB, Antonio Higueruelo y de los inspectores de las zonas de Jódar y Villacarrillo, Santiago Debón y Ana María Macías. Es el premio a “la completa dedicación a la docencia y a sus pueblos de origen, el continuo interés por el perfeccionamiento del profesorado y el espíritu de compenetración con el pueblo”, como dijo Soriano Serrano. Recibió el lazo en una comida homenaje celebrada el día 28.

En 1992 fue nombrada Socio de Honor de SAUDAR en un acto entrañable en reconocimiento a la gran labor desarrollada, entregándole un pergamino conmemorativo. El pasado año, y dentro de los actos del 70 aniversario del Colegio “General Fresneda”, se le rindió un profundo homenaje, donde recibió el cariño de todos, fue su último acto público y la última vez que la vimos, días más tarde del acto charlaba con ella en casa de su hermana y me contaba anécdotas de sus años de enseñanza, quedó para más tarde que le hiciese un trabajo sobre los profesores que habían pasado...

Con ella murió toda una institución en la enseñanza de Jódar, hoy estará con su “Niña María” en el cielo, repasando libros, pidiendo por Jódar y reencontrándose con viejos y queridos profesores y alumnos, hablando sobre este Jódar, hambriento de cultura.

Ildefonso Alcalá Moreno

Cuando aún no sabía que Jódar iba a formar parte de mi vida, pues estaba en el servicio militar, y desconocía el destino que me darían al incorporarme de nuevo al Magisterio, me llega con el número 48 de GALDURIA 2ª quincena de Junio de 1974, la tragedia del accidente de tráfico que costaría la vida a los maestros Arroquia-Martínez y a varios alumnos del Colegio General Fresneda, así como los conductores del autobús y camión y los usuarios de los mismos.

En el citado número aparece la foto y un articulo de Dª Filo acerca de los acontecimientos, recordando a cada uno de sus maestros y alumnos desaparecidos en tan luctuoso suceso.

Desde este momento pude apreciar la sensibilidad, el afecto, la delicadeza de esta gran mujer de la que recuerdo las palabras con que terminaba su artículo: "ten valor y pelea con brío que el premio es eterno ... !

Y parece que esas palabras al hacerlas presentes ahora me embargan de emoción, pues pocos meses después, en septiembre me incorporaba a la enseñanza en Jódar, al frente de la Educación de Adultos.  Es como si hubiera sido mi pistoletazo de salida en esta andadura próxima al cuarto de siglo en Jódar.

Ella sería mi directora, en tanto la Educación de Adultos dependió del Colegio General Fresneda.  Muchas horas dedicadas a la colaboración en labores administrativas cuando el Colegio estuvo ubicado, por obras de remodelación, en la Casa de la Cultura. Ilusión, dedicación, magisterio pude absorber de su vitalidad, su carácter...

Hermosa efemérides que compartimos muchos compañe­ros y compañeras cuando el 10 de febrero de 1984, recibe el título de concesión del Lazo de la Orden Civil de Alfonso X El Sabio, de manos del entonces Delegado Provincial de Educación y Ciencia, e hijo de Jódar, D. Francisco Soriano Serrano.

Hoy, catorce años después recordando ese acto tan entrañable que oficialmente se llevó a efecto en el Salón de Actos del C.P. Arroquia-Martínez el 28 de abril del citado a_o, -parece que fue ayer- y después, su nombramiento por SAUDAR como Socio de Honor el 9 de mayo de 1992, y lo que para ella fue lo más emocio­nante y significativo de sus últimos años entre nosotros, el llevar la bandera de la Hermandad del Stmo Cristo de la Misericordia en 1995 que supuso para ella, el bálsamo con que llevar la cruz de su enfermedad hasta el final.

Desde aquí mi homenaje de gratitud a la mujer, maestra, amiga y cofrade. ¡Que el Señor la tenga en su Gloria! ¡Filo, intercede ante el Altísimo por los maestros de ayer, de hoy y de mañana!

Manuel López Pegalajar